El reciente informe del Observatorio de Argentinos por la Educación sobre las pruebas PISA 2022 revela que Argentina continúa enfrentando desafíos significativos en el ámbito educativo. Los resultados, que muestran un estancamiento desde 2018, resaltan la necesidad de abordar urgentemente las dificultades en Matemáticas, Lengua y Ciencia entre los estudiantes.
Las pruebas PISA 2022, que involucraron a 81 países, destacan que el 70% de los estudiantes argentinos no alcanza niveles básicos en Matemáticas, mientras que en Lengua y Ciencia, la situación no es menos preocupante, con un 50% de los adolescentes no logrando los niveles mínimos de desempeño.
Argentina se ubicó en el puesto 66 del ranking, mostrando pocos avances desde 2018. En Matemáticas, el país obtuvo 378 puntos, quedando rezagado frente a otras naciones latinoamericanas como Chile, Uruguay, Costa Rica, México, Perú, Colombia y Brasil. Estos resultados reflejan un preocupante 72,9% de estudiantes por debajo del Nivel 2 de desempeño en esta área.
En cuanto a Lengua, los datos indican que Argentina descendió de 402 puntos en 2018 a 401 en 2022. La comparación con otros países latinoamericanos posiciona a Argentina por debajo de Chile, Uruguay, Costa Rica, México, Brasil, Colombia y Perú. Más del 54% de los estudiantes se sitúa por debajo del Nivel 2 de desempeño en esta materia.
En Ciencia, Argentina alcanzó los 406 puntos, ubicándose por debajo de varios países latinoamericanos y con más de la mitad de los estudiantes (53,9%) por debajo del Nivel 2 de desempeño.
El informe destaca que los resultados en los niveles más altos de desempeño (Niveles 5 y 6) son preocupantemente bajos en comparación con el promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
En el ámbito internacional, Singapur, Macao (China), China Taipei, Hong Kong (China) y Japón lideran el ranking en Matemáticas, mientras que Argentina se encuentra enfrentando desafíos que requieren atención urgente para mejorar la calidad educativa.
La publicación resalta que, además de las consecuencias del contexto pandémico, la persistencia de estos desafíos en la educación argentina subraya la necesidad de reformas y enfoques innovadores para revertir esta tendencia preocupante.
