Buenos Aires, Argentina (28 de abril de 2024) – En un esfuerzo por agilizar y desburocratizar los trámites vehiculares, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) ha eliminado el Certificado de Transferencia de Automotores (CETA) a partir del pasado jueves 25 de abril.
Este documento, hasta ahora obligatorio para realizar transferencias de vehículos usados en el Registro Automotor, ya no será necesario, simplificando considerablemente el proceso para los ciudadanos.
La medida, enmarcada en la política de modernización y simplificación de la AFIP, busca eliminar requisitos innecesarios y agilizar la operatoria de transferencia e inscripción de vehículos usados.
De esta manera, se espera reducir los tiempos de espera y trámites burocráticos para los contribuyentes, optimizando la experiencia general.
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¿Cómo funciona el nuevo sistema?
A partir de ahora, para realizar la transferencia de un vehículo usado, los interesados deberán presentar únicamente la siguiente documentación en el Registro Automotor:
* **Título del automotor o motovehículo.**
* **Documento Nacional de Identidad (DNI) del vendedor y comprador.**
* **Formulario 08.**
* **Seguro obligatorio contra accidentes de tránsito (OAT).**
* **Cédula verde y/o azul.**
* **Comprobante de pago de la patente al día.**
* **Verificación técnica vigente (VTV).**
* **Copia del acta de constatación policial (en caso de haberla).**
¿Qué pasa con las deudas de patente y multas?
En caso de que el vehículo tenga deuda de patente, el comprador deberá asumirla antes de realizar la transferencia. Para ello, podrá solicitar un volante de deuda en el Registro Automotor o en la página web de la AFIP.
Por otro lado, las multas impagas no impedirán la transferencia del vehículo, pero el comprador deberá hacerse cargo de las mismas una vez que el vehículo esté a su nombre.
Para consultar el estado de las multas, se puede acceder a la página web de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV).
Beneficios de la eliminación del CETA
La eliminación del CETA trae consigo diversos beneficios para los ciudadanos que realizan transferencias de vehículos usados:
* Reducción de tiempos de espera y trámites burocráticos.
* Simplificación del proceso de transferencia.
* Menor cantidad de documentación requerida.
* Mayor agilidad y eficiencia en las operaciones.
La medida ha sido recibida con beneplácito por parte de los usuarios, quienes valoran la eliminación de un trámite innecesario y la agilización del proceso de transferencia de vehículos usados.
Se espera que esta iniciativa contribuya a mejorar la experiencia general de los contribuyentes y a fomentar la formalización en el mercado automotriz.
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