En un intento por fortalecer el control sobre jefes narcos y sicarios recluidos en las unidades penitenciarias provinciales, el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, anunció la restitución de los pabellones de alto perfil.
Esta medida se enmarca en un conjunto de acciones que buscan frenar la comisión de delitos desde el interior de las cárceles. Además, se implementarán inhibidores de señal y se suspenderá el ingreso de alimentos, todo en pos de revertir una crítica situación de recursos en materia de seguridad.
En una conferencia de prensa, Pullaro detalló la operación en curso para restituir los pabellones de alto perfil, afirmando que esto permitirá un mayor control sobre los reclusos de alta peligrosidad.
Explicó que los líderes del narcotráfico y sicarios serán ubicados en estos pabellones, donde estarán sometidos a monitoreo las 24 horas del día. Se establecerá un sistema de comunicación a través de un blindex con familiares y abogados para evitar la comisión de delitos desde la cárcel.
Además, el gobernador anunció la reinstalación de inhibidores de señal, una medida que busca evitar la coordinación de actividades ilícitas desde el interior de las prisiones. También se suspenderá el ingreso de alimentos, con el propósito de mejorar la seguridad al evitar la introducción de elementos no autorizados.
En relación con la situación de recursos, el ministro de Seguridad, Pablo Cococcioni, detalló medidas adicionales, incluyendo un bloqueo administrativo de 90 días que implica la clausura de oficinas policiales no funcionales y el despliegue de más efectivos a las calles. Se priorizará la recuperación y refacción de la flota policial para garantizar que los vehículos estén en condiciones óptimas.
Estos cambios, considerados como extremos pero necesarios, buscan abordar una situación crítica en la seguridad de la provincia y fortalecer las capacidades del sistema penitenciario para enfrentar los desafíos presentes.
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