En la madrugada de este 7 de junio, se produjo el hallazgo de una caja registradora de color negro.
Aproximadamente a las 03:00 de lamañana del día de hoy, las autoridades policiales recibieron una llamada a través de la frecuencia radial 911 que alertaba sobre la presencia de individuos sospechosos en un kiosco ubicado en la intersección de las calles Dean Funes y Marozzi.
Rápidamente, los efectivos policiales de la U.R.V. se dirigieron al lugar señalado, más precisamente a la dirección de Marozzi 1947. Al arribar, recopilaron información de testigos que indicaban que los individuos habían arrojado objetos en un contenedor situado en la cercana intersección de las calles Don Orione y Echeverría.
Al llegar al contenedor en cuestión, los agentes encontraron una caja registradora de color negro en su interior. Además, se constató la presencia de un testigo en el lugar.
La caja registradora, cuyo secuestro fue inmediato, no contenía dinero ni elementos de valor en su interior. Aunque resulta intrigante el motivo por el cual dicha caja fue depositada en el contenedor, las autoridades policiales no descartan la posibilidad de que se trate de un objeto descartado por algún comercio o establecimiento local.
Posteriormente, la caja registradora fue trasladada a la dependencia policial correspondiente, donde se llevarán a cabo las diligencias necesarias para determinar si está vinculada a algún hecho delictivo previo.
> Te puede interesar: Recuperaron un estatua de San Expedito que había sido robada
La U.R.V. se encuentra trabajando activamente para desentrañar el misterio que rodea este suceso, en estrecha colaboración con la Fiscalía local. Se insta a cualquier persona que pueda aportar datos o información relevante sobre este hecho a que se comunique con las autoridades para contribuir al avance de la investigación.
A medida que se desarrolle la investigación, se espera que se aclaren los detalles de este singular suceso y se brinden mas detalles oficiales de parte de la policía.
