En respuesta a la reciente escalada del dólar y la creciente inflación en Argentina, el Banco Central ha decidido aumentar las tasas de interés de los depósitos a plazo fijo. El rendimiento de estos depósitos ahora se establecerá a una tasa nominal del 145%, que equivale al 12% mensual y al 293% efectivo anual.
Este cambio tiene como objetivo evitar la retirada de depósitos por parte de los ahorristas, que se ha intensificado en las últimas semanas debido a la inflación que supera la tasa de rendimiento de los plazos fijos.
El Banco Central había aumentado la tasa en 21 puntos básicos al 118% después de la devaluación que ocurrió después de las elecciones primarias. Sin embargo, la inflación se mantuvo alta y se consumió el rendimiento en pesos. Esta medida llega tras la recomendación de Javier Milei, candidato de La Libertad Avanza, de no renovar los plazos fijos, lo que generó aún más incertidumbre en el mercado financiero.
La decisión del Banco Central también se produce después de la presentación del índice de inflación de septiembre. El banco espera que esta medida ayude a contener la retirada de depósitos y contribuya a estabilizar la economía en el contexto de la creciente inflación y el aumento de la tensión cambiaria.
La situación económica en Argentina ha llevado a que los ahorristas prefieran mantener sus fondos en efectivo o buscar refugio en otras monedas, como el dólar, lo que ha contribuido a la caída de los depósitos en el sistema bancario.
El gobierno y el Banco Central enfrentan desafíos para frenar la inflación y restaurar la confianza en la moneda local. Esta medida también se produce justo antes de un viaje clave del presidente del Banco Central, Miguel Ángel Pesce, a China, en un intento por contener la subida del dólar y estabilizar la economía.
