La producción de Gran Hermano sorprendió a los concursantes con un cambio drástico en las reglas, dejándolos a todos nominados. Santiago del Moro anunció la modificación durante una reunión en la casa, generando impacto entre los participantes. Además, se introdujo la posibilidad de doble eliminación en la próxima gala.
Gran Hermano experimentó un cambio sorprendente en sus reglas, llevando a todos los participantes a quedar nominados. La decisión de la producción fue revelada durante una reunión en la casa, convocando a los concursantes al living, donde Santiago del Moro les comunicó la noticia.
El conductor del programa abordó a cada concursante, anunciando que todos estaban nominados para la próxima gala de eliminación. El giro radical en las reglas buscó generar un impacto y motivar a los participantes a involucrarse más activamente en el juego.
El cambio no se detuvo allí. Santiago del Moro explicó que, en lugar del tradicional sistema de votación negativa, esta semana los televidentes tendrían la oportunidad de emitir votos positivos para decidir quiénes deberían permanecer en la casa. La prueba de liderazgo también jugaría un papel crucial, ya que el ganador obtendría beneficios especiales en esta semana atípica.
Además, se anunció una modificación clave que generó aún más tensión entre los participantes. En lugar de una sola eliminación, la próxima gala contemplaría la posibilidad de una doble eliminación. La primera se llevaría a cabo el domingo, como de costumbre, y la segunda tendría lugar el lunes siguiente, agregando un elemento inesperado a la competencia.
El cambio drástico en las reglas busca revolucionar la dinámica del juego, instando a los concursantes a tomar decisiones estratégicas y a los televidentes a participar activamente en la elección de quienes permanecerán en la casa de Gran Hermano.
