En una destacada actuación el pasado domingo, Atlético de Rafaela se recuperó de su reciente tropiezo en Salta con una victoria contundente. El encuentro, correspondiente a la cuarta fecha de la Zona B de la Primera Nacional, vio al equipo celeste imponerse de manera convincente sobre Gimnasia y Esgrima de Mendoza con un marcador final de 4-1.
El protagonista indiscutible de la noche fue Nazareno Funez, cuyo desempeño estelar dejó una marca imborrable en la memoria de los seguidores de Atlético de Rafaela. Pero antes de sumergirnos en la actuación magistral de Funez, repasemos los momentos clave que definieron el partido.
Desde el primer silbato, Atlético exhibió superioridad en el terreno de juego. A pesar de las condiciones difíciles provocadas por las lluvias recientes, el equipo dirigido por Ezequiel Medrán mantuvo el orden colectivo y desplegó un esfuerzo sobresaliente en todas las líneas. El primer gol surgió gracias a Lucas Albertengo, quien envió un centro desde la izquierda que encontró a Capurro en el área chica. El mediocampista no dudó y puso a Atlético en ventaja.
Sin embargo, la noche estaba destinada a pertenecer a Funez. El delantero dejó su huella en el marcador con cabezazos certeros tras centros desde la izquierda. Su segundo gol llegó después de un pelotazo largo de Quiroz, que Funez definió con maestría al segundo palo. El tan ansiado hat-trick se completó con un golazo, cuando Funez bajó elegantemente la pelota y la colocó entre las piernas del arquero rival.
A pesar del descuento de Gimnasia con un gol de Gutiérrez, Atlético selló la victoria con autoridad. Este triunfo no solo marca la recuperación después de la derrota anterior, sino que también representa los primeros tres puntos en condición de local para el equipo celeste. La hinchada celebró con entusiasmo y ahora aguarda con expectación el próximo enfrentamiento contra Nueva Chicago.
Nazareno Funez, con su actuación inspirada, se erigió como el héroe de la noche, dejando una huella imborrable en la rica historia de Atlético de Rafaela. ¡Una noche verdaderamente memorable para los fieles seguidores celestes!
