La Universidad Tecnológica Nacional (UTN) Facultad Regional Rafaela (FRRa) busca integrar el extensionismo como parte fundamental de sus planes de estudio. En una charla-taller, el Ing. Federico Olivo, secretario de Cultura y Extensión Universitaria de la UTN, explicó que esta iniciativa permitirá a estudiantes y docentes desarrollar proyectos en la comunidad que transfieran conocimientos académicos y generen un impacto tangible, a la vez que fomentan la empatía y la formación integral de los futuros profesionales.
Ayer por la tarde, la Regional Rafaela de la UTN fue anfitriona de una charla-taller titulada “Curricularización del Extensionismo en el Ámbito de la Universidad Tecnológica Nacional”. El evento contó con la presencia del Ing. Federico Olivo, secretario de Cultura y Extensión Universitaria de la UTN, y reunió a docentes, estudiantes y nodocentes de la institución. Esta propuesta, que se está implementando en todas las unidades académicas del país, busca transformar la manera en que la universidad interactúa con su entorno.
Vinculando el saber académico con el territorio
Según explicó Olivo, la curricularización del extensionismo se centra en la realización de trabajos de campo que vinculan directamente los conceptos académicos con el territorio. El objetivo es que los estudiantes, junto a sus docentes, planifiquen actividades que permitan transferir conocimientos universitarios a diversas organizaciones de la comunidad, como ONGs, industrias, municipios y clubes.
El propósito principal es generar un impacto tangible y acreditable en estas organizaciones. El secretario enfatizó que es una oportunidad para que el estudiante “pueda, junto con el docente, planificar una actividad vinculada con los conocimientos que generen alguna competencia y que tenga algún impacto en alguna organización”. Este enfoque busca desdibujar las fronteras entre ciencia, tecnología y extensión, promoviendo una interacción más sinérgica entre el sistema universitario y su entorno. Para lograrlo, es fundamental “tener docentes más extensionistas que puedan generar a través de los nuevos planes de estudio y diseños curriculares, este objetivo fundamental”.
Empatía, acreditación y ODS: Pilares de la iniciativa
Olivo destacó la importancia de esta iniciativa en el desarrollo de una profunda empatía de los estudiantes con la comunidad, más allá de la aplicación de competencias técnicas. “La gran diferencia es que va a ser acreditable. Es decir, va a existir trazabilidad, e impacto en la formación, pero también en la acreditación del estudiante y de la institución a través de la CONEAU”, agregó.
La filosofía subyacente a esta política es clara: “conceptualmente creemos en esto. Antes de formar profesionales, formamos buenas personas”. Para Olivo, “en la formación y en las competencias que debe tener un profesional tiene que estar la parte de empatía con nuestra comunidad, porque en definitiva a través de la ingeniería se puede transformar vidas”.
Además, esta propuesta se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), buscando que la Universidad identifique necesidades comunitarias y aporte soluciones a través de la educación y la curricularización de la extensión. El secretario subrayó que se trata de “entender la necesidad que tiene la comunidad y cómo yo a través de esa necesidad puedo aportar una solución. Que no tenga que mediar siempre un aspecto económico, sino que tiene que ver con la función sustantiva de resolver problemas de la comunidad”.
Olivo concluyó que la meta es “fortalecer el rol de la UTN como una ‘universidad 360’, capaz de llegar a sectores donde otros no llegan, a través de la educación y con la herramienta de la curricularización de la extensión”.