En la ciudad de Rafaela, pocas personas han dejado una huella tan profunda y entrañable como Ramón Rodríguez, más conocido cariñosamente como Ramoncito, el garrapiñero de Bv. Santa Fe. Su vida y su labor no solo fueron una constante en el bullicio de la ciudad, sino también un reflejo de su inagotable alegría y espíritu comunitario.Durante más de dos décadas, Ramoncito no solo vendió golosinas; brindó momentos de felicidad y compañía a todo aquel que pasaba por su carrito. A sus 65 años, nos dejó físicamente, pero su legado perdurará en el corazón de todos los rafaelinos.Un Carrito, Mucho Más que un TrabajoRamoncito comenzó su travesía hace 24 años, con su carrito de golosinas junto a su pareja, justo frente a lo que en ese entonces era el "Free Shop".El mundo alrededor de...