En un tranquilo viernes por la noche, un almacén ubicado en la calle Constituyente se convirtió en el escenario de un violento robo. El incidente ocurrió a las 22:10 horas del 2 de agosto, dejando a los presentes atónitos y preocupados por su seguridad.
El delincuente, previamente reconocido por la víctima debido a robos anteriores, ingresó al local bajo la apariencia de un cliente común. Tras comprar un artículo menor, su verdadera intención se reveló: amenazar al propietario y exigir el dinero de la caja registradora.
Con determinación y simulando tener un arma escondida en la cintura, el ladrón advirtió que dispararía si no se cumplía con su demanda. La víctima, temiendo por su vida, entregó aproximadamente 30.000 pesos en efectivo al delincuente, quien huyó rápidamente del lugar.
El comerciante describió al sospechoso como un hombre de 1,70 metros de altura, piel trigueña y vestimenta distintiva: una gorra gris, una chomba rosada y una campera negra. Las autoridades locales están investigando el caso para dar con el paradero del responsable y garantizar la seguridad de la comunidad.
Este incidente resalta la importancia de la vigilancia y la cooperación entre vecinos y comerciantes para prevenir futuros robos. La comunidad debe permanecer alerta y confiar en las fuerzas de seguridad para mantener la paz y la tranquilidad en nuestras calles.
