En una operación conjunta entre el Comando Radioeléctrico y la GUR, se logró recuperar varios elementos robados en Rafaela. El incidente ocurrió en la intersección de las calles M. Oliber y Azcuénaga, y la rápida acción policial fue clave para resolver el caso.
La historia comenzó cuando el Comando Radioeléctrico, en plena recorrida, recibió una comunicación urgente de la Central de Emergencias 911. El reporte indicaba que en la calle Falucho e H. Irigoyen, se encontraba un individuo relacionado con un delito reciente. Los elementos sustraídos estaban en su poder.
Al llegar al lugar, los uniformados identificaron al implicado, un menor de edad. El Juzgado de Menores tomó conocimiento del caso y ordenó el secuestro de los elementos. Además, se notificó a la Subsecretaría de la Niñez, Adolescencia y Familia sobre la situación del menor.
El traslado del joven hacia la Comisaría Seccional Nº 15 se realizó sin contratiempos. Allí, se procedió al secuestro de prendas de vestir, una bicicleta y otras pertenencias para determinar su procedencia real. La Subsecretaría de la Niñez, Adolescencia y Familia ordenó la restitución del menor a sus padres.
Pero la historia dio un giro. Un hombre de 38 años se presentó en la dependencia policial. Relató que estaba en la casa de su novia en la calle J.J. Paso al 1500 cuando una vecina lo alertó sobre un chico en su auto. Al verificar, descubrió que la puerta del conductor estaba forzada y que faltaban prendas de vestir y otros objetos que habían estado bajo llave.
Cuando se le mostraron los elementos secuestrados previamente, el hombre los reconoció de inmediato. El personal actuante procedió a devolvérselos. Las investigaciones continúan, y las autoridades están comprometidas en esclarecer los detalles del caso.