Rafaela se unió este martes a la conmemoración de los 10 años del movimiento Ni Una Menos. Mujeres rafaelinas se congregaron en la Plaza 25 de Mayo para un encuentro que combinó reflexión, música, arte y la lectura de un documento que visibilizó los desafíos pendientes en la lucha contra la violencia de género.
Por iniciativa de la Asamblea Feminista local, la tarde rafaelina se tiñó de violeta. Alrededor de las 19:00, las asistentes se reunieron en una ronda para disfrutar de la música de la cantante rafaelina Celina Astudillo y observar la intervención de un banco pintado de lila, creando un ambiente de escucha atenta y reflexión.
Una década de lucha y un saldo alarmante
El encuentro dio paso a la lectura del documento habitual, que comenzó destacando el crecimiento del movimiento Ni Una Menos, surgido hace una década tras el femicidio de Chiara Páez en Rufino. “Ese 3 de junio de 2015 nos encontramos en la calle, en la plaza, organizaciones, escuelas, familias. Hubo intervenciones, cantos, carteles, banderas… Hubo mucha gente. Mucha. Y un solo sentir: a las violencias se les responde en comunidad. En los años siguientes, la lucha creció, la participación fue mayor y las denuncias por género aumentaron de una manera nunca antes vista”, expresó el texto.
A pesar de los avances en visibilización, el informe del Observatorio Nacional Mujeres, Disidencias, Derechos de MuMaLá (Mujeres de la Matria Latinoamericana) reveló cifras alarmantes: desde el 1 de junio de 2015 hasta el 30 de mayo de 2025, se registraron 2.589 femicidios, femicidios vinculados y trans/travesticidios en Argentina, lo que implica que una víctima muere cada 33 horas. Del total, el 86% fueron femicidios directos, dejando a 2.788 niñas, niños y adolescentes huérfanos. Además, el 64% de los femicidios ocurrieron dentro del hogar de la víctima y el 50% de las víctimas tenían entre 19 y 40 años.
Derechos en riesgo y llamado a la acción
El documento también instó a una profunda reflexión sobre lo que aún queda por conquistar y, fundamentalmente, por defender. “A lo largo de esta década es mucho el recorrido, lo logrado y legislado. Queda tanto más por seguir desarmando y construyendo un lugar más justo. Queda especialmente defender los derechos que se consiguieron con tantas luchas”, subrayó el texto.
En un contexto de recortes, las agrupaciones presentes hicieron hincapié en la preocupación por la reducción de fondos destinados a programas de género y prevención de la violencia, advirtiendo que “las consecuencias de estos recortes las pagan las mujeres con sus vidas, su salud física y mental, y la de sus familias”.
Finalmente, el comunicado expresó solidaridad con los reclamos de jubilados, así como con los recortes en educación y discapacidad. El documento, firmado por más de 20 agrupaciones y gremios, concluyó con un llamado a la unidad y la resistencia: “Hoy ante un panorama de retroceso en materia de derechos, la fuerza feminista interseccional sigue siendo una apuesta necesaria para construir una alternativa antifascista y antirracista, en alianza con los colectivos LGBTINBQ+ y otros como el de los jubilados, las universidades, los trabajadores de la salud, la docencia, la ciudadanía toda. Porque ningún cuerpo es descartable, porque la violencia deja huellas en todas las personas y porque nos mueve el deseo empecinado de diseñar y experimentar otras formas de vida.”
Cada 3 de junio, miles de mujeres en todo el país salen a las calles para reclamar por sus derechos y honrar a quienes ya no están. Rafaela, como cada año, se sumó a esta lucha, invitando a la comunidad a continuar la discusión y el pensamiento colectivo.