Este jueves 24 de octubre, Rafaela celebró un nuevo aniversario de su formación, un momento propicio para reflexionar sobre los orígenes de esta ciudad pujante, ubicada en el corazón de la provincia de Santa Fe.
Aunque no se tiene registro de un acta fundacional, la historia de Rafaela es un testimonio del esfuerzo y dedicación de los colonos que, hace más de un siglo, sentaron las bases de lo que hoy conocemos como una de las principales ciudades de la región.
Los inicios: colonización y asentamiento
La mayor parte del territorio santafesino se pobló mediante un sistema de colonización privada, que se extendió en tres sectores: Norte, Centro y Sur.
En el caso de Rafaela, se encuentra dentro del sector Centro, en el que otras colonias como Esperanza, San Agustín y San Carlos también fueron clave en el desarrollo del oeste santafesino.
La ciudad fue formada en 1881 por un grupo de 11 familias de inmigrantes, principalmente de origen italiano, así como suizos, franceses y alemanes, quienes encontraron en estas tierras una oportunidad para prosperar.
Las tierras donde se asentó la colonia pertenecían a terratenientes de Buenos Aires y fueron vendidas por la empresa colonizadora del empresario alemán Guillermo Lehmann.
El sistema de venta de tierras ofrecía concesiones a los productores agropecuarios, quienes pagaban por ellas con los frutos de sus cosechas.
Esta modalidad permitió a muchos inmigrantes convertirse en propietarios de la tierra y establecerse en la región. En tan solo ocho meses, se había vendido más del 50 % de las concesiones, demostrando la rápida expansión y el éxito del proyecto.
Un espíritu de sacrificio y progreso
Los primeros colonos se destacaron por su espíritu de lucha y su capacidad para enfrentar las dificultades. La necesidad de pagar las tierras fomentó una cultura de ahorro y sacrificio, que se tradujo en un crecimiento sostenido.
En apenas dos años, la población de la colonia aumentó un 8 % y la superficie destinada a la agricultura creció un 13 %. El 26 de enero de 1913, Rafaela fue declarada ciudad por decreto del Gobierno de la Provincia, marcando un hito en su historia.
Rafaela: Un nombre con historia
El nombre de la ciudad rinde homenaje a Rafaela de Egusquiza, esposa de un amigo íntimo de Guillermo Lehmann, quien jugó un papel clave en la venta de las tierras. Aunque no existe una fecha exacta de su fundación, este detalle resalta la importancia de las personas detrás del desarrollo de Rafaela.
La Marcha de Rafaela
La ciudad también cuenta con su propia marcha, titulada “Ciudad de Rafaela”, compuesta por Mario Vecchioli (letra) y Remo Pignoni (música).
En el año 2011, en el marco del 130º aniversario de la formación de la ciudad, se estrenó el videoclip oficial de esta tradicional canción, con arreglos musicales de Fernando Abratte y la participación de varios artistas locales.
Hoy, Rafaela se erige como un centro de desarrollo económico y social en la región, con un fuerte arraigo en su historia y en los valores de trabajo que forjaron sus primeros habitantes.