El martes 19 de diciembre, se vivió un momento tenso en Gran Hermano cuando se determinó al nuevo líder de la semana, siendo Martín Ku el ganador del desafío. Sin embargo, la celebración se vio empañada por las acusaciones de Alan Simone, quien afirmó haber sido perjudicado durante la competencia.
La prueba consistía en llevar tres latas sobre un palo a través de un laberinto con obstáculos, y el equilibrio era clave para el éxito. Al concluir la competencia, Alan expresó su enojo en vivo y frente a Santiago del Moro, conductor del programa.
“Me tocó un palo distinto que a ellos dos, a ellos les tocó el mismo. No sé, estaba raro el palo. Sentía que estaba cortado arriba. Nunca equilibraba bien. Sentía que estaba mal”, denunció Simone, insinuando que la diferencia en los elementos utilizados durante la prueba fue injusta.
El reclamo de Alan Simone generó un momento de tensión en el set, y Santiago del Moro, en un intento por mantener la dinámica del programa, le dio rápidamente la palabra a otro participante, evitando profundizar en la controversia en ese momento.
La denuncia de Simone agrega un elemento de intriga y debate en la competencia, dejando a los espectadores a la espera de posibles desarrollos en torno a la supuesta desigualdad en las condiciones de la prueba.