Un hombre en Kazajistán recurrió a ChatGPT para disputar una multa de tránsito y, para sorpresa de todos, ¡la inteligencia artificial lo ayudó a ganar el caso en la audiencia judicial!
Una historia digna de la ciencia ficción ocurrió en Kazajistán, donde un joven llamado Kenzhebek Ismailov decidió enfrentar una multa de tránsito de una manera completamente innovadora: utilizando la inteligencia artificial de ChatGPT como su “abogado” y asesor legal.
Ismailov había sido multado con 5.800 tenge (unos 11 dólares) por conducir en el carril exclusivo para buses. Su justificación era que había tenido que esquivar un auto detenido sin motivo en el único carril disponible mientras llevaba a su madre de urgencia al hospital. A pesar de su reclamo inicial, las autoridades de tránsito lo rechazaron.
Decidido a no pagar una multa que consideraba injusta y sin recursos para contratar un abogado por un monto tan bajo, Kenzhebek recurrió a ChatGPT, el modelo de lenguaje de Open AI, en busca de asesoramiento legal.
ChatGPT al rescate legal
El joven detalló minuciosamente su situación a ChatGPT, y la inteligencia artificial le recomendó llevar el caso ante la justicia, incluso redactando los textos y la documentación necesaria para presentar su demanda.
Sorprendentemente, al presentar la demanda, las autoridades le ofrecieron cancelar la multa y devolverle el dinero. Sin embargo, Kenzhebek, siguiendo el consejo de ChatGPT, decidió continuar con el proceso judicial.
La IA toma la palabra en la audiencia
Llegó el día de la audiencia, y Kenzhebek tomó una decisión que dejó atónitos a todos los presentes y a las autoridades judiciales: mientras escuchaba al juez, consultaba en tiempo real a ChatGPT y, aún más sorprendente, ¡utilizó la función de chat de voz para que la propia inteligencia artificial respondiera al juez!
Para asombro de muchos, esta estrategia legal asistida por IA resultó exitosa. Tras la audiencia, Kenzhebek Ismailov celebró su victoria, afirmando que este probablemente fue el primer juicio en Kazajistán (y quizás en el mundo) llevado a cabo en un 99% con la ayuda de ChatGPT.
Este caso sin precedentes plantea interrogantes fascinantes sobre el futuro del acceso a la justicia y el papel que la inteligencia artificial podría desempeñar en los procesos legales, incluso para disputas menores como una multa de tránsito.