
Entre las víctimas se encuentran su ex pareja, dos hijas que tenían en común y un hijo de ella.
Un hombre de 42 años, identificado con las iniciales LHS, fue condenado a una pena de 22 años de prisión tras ser hallado culpable de graves delitos contra la integridad sexual en perjuicio de cuatro personas de su propio entorno familiar en la ciudad de Rafaela.
La contundente sentencia fue dictada por unanimidad por un tribunal integrado por los jueces Gustavo Bumaguin (presidente), Juan Gabriel Peralta y José Luis Estévez, al finalizar un juicio oral y público que se llevó a cabo en los tribunales de la ciudad.
La fiscal Gabriela Lema, quien estuvo a cargo de la investigación y representó al Ministerio Público de la Acusación (MPA) durante el debate, expresó su satisfacción con el veredicto. “Los magistrados ordenaron una pena cercana a la de 25 años que habíamos pedido en nuestros alegatos”, destacó, y añadió que “la mujer que resultó víctima estuvo presente en la audiencia de lectura del veredicto y manifestó su conformidad con el trabajo que realizamos desde la Fiscalía”.
Un patrón de violencia y abuso escalofriante
La fiscal Lema detalló el horror que vivieron las víctimas durante años: “Entre 2012 y 2020, el condenado ejerció violencia de género física y psicológica contra la mujer que era su pareja”, precisando que “los ilícitos tuvieron lugar en distintos inmuebles en los que convivieron”. Relató que el hombre “solía someterla a golpizas y luego la encerraba en una habitación para que otras personas no vieran las heridas que él le provocaba”. Además, la obligó en reiteradas ocasiones a mantener relaciones sexuales en contra de su voluntad.
El accionar del condenado no se limitó a su pareja. “En el ámbito doméstico, el condenado tenía tratos violentos con un hijo de su pareja que era bebé cuando comenzaron las conductas delictivas, así como con sus propias hijas, nacidas en 2014 y 2018, respectivamente”, especificó Lema.
En 2020, la mujer logró abandonar el hogar junto a sus tres hijos. Sin embargo, un año después, el condenado obtuvo un régimen de visitas para sus hijas menores de edad. “En diferentes ocasiones, ellas y su hermano quedaron al cuidado del agresor”, señaló la fiscal, revelando el escalofriante contexto en el que “delante del niño, el hombre de iniciales LHS cometió abusos sexuales en perjuicio de las pequeñas”.
La fiscal Lema fue categórica al afirmar que “por sus características y contexto, lo sucedido tuvo la entidad suficiente para vulnerar el desarrollo libre y progresivo de la sexualidad de las tres víctimas menores de edad”.
Los delitos por los que fue condenado
LHS fue declarado culpable como autor de los delitos de:
Abuso sexual con acceso carnal en perjuicio de su ex pareja.
Abuso sexual gravemente ultrajante agravado (por la guarda y por ser ascendiente) en perjuicio de sus dos hijas.
Promoción a la corrupción de menores agravada (por la guarda y la edad de las tres víctimas menores de 18 años y por ser ascendiente en el caso de sus dos hijas).
Es importante destacar que el nombre completo del condenado no se divulga para proteger la identidad de dos de las víctimas, quienes comparten el mismo apellido. Esta condena representa un paso importante en la búsqueda de justicia para las víctimas de este terrible caso de abuso intrafamiliar.