La innovadora creación, cargada como un celular, ha generado curiosidad y escepticismo entre los amantes del mate, pero Gallego defiende su producto como una solución para aquellos que buscan disfrutar de la infusión rioplatense sin preocuparse por el enfriamiento de la yerba.
Dentro del bullicio del pabellón de los expositores en la Rural, el stand de Pablo Gallego destaca por su singularidad. Allí, este joven emprendedor ofrece su más reciente creación: un mate eléctrico que ha sorprendido a muchos, especialmente a los gauchos tradicionales, por su diseño innovador. Aunque inicialmente recibido con escepticismo, Gallego está convencido de haber dado con un producto revolucionario que cambiará la forma de disfrutar el mate.
El funcionamiento del mate eléctrico es sencillo y efectivo. Fabricado con un revestimiento de acero y una base que se carga mediante USB, al igual que un celular, este singular mate consume solo 7 watts. Una vez colocado sobre la base, una luz indicadora se enciende, y el dispositivo comienza a calentarse hasta alcanzar una temperatura de entre 50 y 60 grados Celsius.
En diálogo con Bichos de Campo, Pablo Gallego explicó que el objetivo no es calentar el agua, sino mantener caliente la yerba. Argumenta que muchas veces, el mate se enfría antes de poder disfrutarlo por completo, lo que lleva al desperdicio de yerba y energía.
Con su invento, el mate eléctrico, Gallego asegura que se puede disfrutar de la infusión por mucho más tiempo, ya que mantiene la yerba en perfecto estado durante ocho o incluso diez horas.
El emprendedor realizó exhaustivas pruebas para respaldar su invención. Utilizando cámaras térmicas y termómetros, comparó el comportamiento de su mate con otros de materiales más tradicionales, como madera o calabaza. Los resultados demostraron que el mate eléctrico conserva la temperatura del agua de manera más eficiente, evitando el enfriamiento prematuro.
Gallego también se enorgullece de la eficiencia energética de su producto. Asegura que el consumo diario del mate eléctrico equivale a apenas 5 pesos al mes, haciendo hincapié en que el ahorro en yerba y la facilidad de uso hacen que la inversión valga la pena.
Sin embargo, reconoce que su invento no es para todos, ya que cada persona tiene su propia forma de disfrutar el mate. Mientras algunos lo toman de forma continua, otros lo saborean pausadamente a lo largo del día, y para estos últimos, el mate eléctrico se convierte en una opción ideal.
Aunque los gauchos y los puristas del mate puedan mirar con desconfianza este invento, Pablo Gallego se muestra confiado en que su mate eléctrico encontrará su lugar en la tradición argentina.
Con esta innovadora creación, busca brindar una nueva experiencia a los amantes de la infusión, permitiéndoles disfrutar de su sabor y aroma por mucho más tiempo sin preocuparse por el enfriamiento de la yerba. Sin duda, este emprendedor ha demostrado que la combinación entre tradición y tecnología puede llevar a la creación de productos sorprendentes y útiles para el día a día.