El consumo de pollo se dispara mientras la carne vacuna pierde terreno en Santa Fe

La diferencia de precios impulsa un cambio en la dieta de los santafesinos, con el pollo ganando protagonismo en la mesa familiar.

Con info de LT10 – El panorama alimenticio en Santa Fe está experimentando un cambio significativo, con un notable aumento en el consumo de pollo y una marcada disminución en la demanda de carne vacuna. Este cambio se atribuye principalmente a la considerable diferencia de precios entre ambos productos, según indica la Cámara Avícola Santafesina.

Alejandro Coianiz, presidente de la Cámara Avícola Santafesina, explicó en una entrevista con LT10 que el incremento en el consumo de pollo no se debe tanto a un aumento en la preferencia por esta carne, sino a la reducción en el consumo de carne vacuna. “Más que subir el consumo de pollo, bajó el consumo de la carne vacuna”, destacó Coianiz, señalando que la principal causa es el aumento desmesurado en el precio de la carne vacuna.

El precio del kilo de carne vacuna ha alcanzado cifras que oscilan entre los 8.000 y 10.000 pesos, lo que ha llevado a muchos santafesinos a buscar alternativas más asequibles. En contraste, el kilo de pollo se mantiene alrededor de los 3.000 pesos, haciendo de esta opción una alternativa económica para la dieta diaria. Esta diferencia de precios ha convertido al asado, un plato tradicional y querido, en un lujo reservado para ocasiones especiales y celebraciones.

“La gente se corre hacia otros tipos de carne debido a los costos”, explicó Coianiz. Esta tendencia no solo refleja un cambio en los hábitos de consumo, sino también una adaptación a las restricciones económicas que enfrentan muchas familias. A pesar de la disminución en el consumo de carne vacuna, los argentinos siguen siendo unos de los mayores consumidores de pollo en el mundo, una tendencia que se ha consolidado aún más en el contexto actual.

El sector avícola ha respondido a este cambio en la demanda, cubriendo el vacío dejado por la carne vacuna. “El hueco que está dejando ahora el consumo de carne lo estamos cubriendo nosotros”, afirmó Coianiz, subrayando el papel crucial que está desempeñando la industria avícola en la alimentación de los santafesinos.

Este cambio en la dieta diaria tiene implicaciones importantes para la industria alimentaria y para la economía doméstica. Mientras que el consumo de carne vacuna solía ser una parte esencial de la alimentación cotidiana, el pollo se ha convertido en la opción preferida por su accesibilidad y menor costo. Esta tendencia refleja una adaptación a las realidades económicas y podría tener efectos duraderos en los hábitos alimenticios de la población.