
La Cámara de Diputados de Argentina aprobó con 142 votos a favor un proyecto de ley impulsado por la oposición que establece un incremento del 7,2% en todos los haberes previsionales, eleva el bono extraordinario a $110.000 con actualización mensual y reinstaura la moratoria previsional. La iniciativa fue girada al Senado, en medio de las advertencias del Gobierno sobre un posible veto presidencial por su impacto fiscal.
Buenos Aires, Argentina – La Cámara de Diputados de la Nación dio media sanción a un proyecto de ley que busca recomponer los ingresos de jubilados y pensionados, en una sesión marcada por el intenso debate y las posturas encontradas entre oficialismo y oposición. La iniciativa, que ahora pasa al Senado, fue aprobada con 142 votos a favor, 67 en contra y 19 abstenciones, reflejando el consenso alcanzado por bloques como Unión por la Patria, Encuentro Federal, Democracia para Siempre, Coalición Cívica y el Frente de Izquierda.
Detalles del proyecto y fuentes de financiamiento
El texto aprobado se basa principalmente en el dictamen de mayoría de Unión por la Patria y prevé los siguientes puntos clave:
Un incremento del 7,2% para todos los haberes previsionales.
Un aumento del bono extraordinario a $110.000, con su posterior actualización mensual por índice de movilidad. Cabe recordar que el bono se encontraba congelado en $70.000.
La transferencia de fondos de la ANSeS a las provincias con cajas previsionales no transferidas.
La incorporación por ley de la fórmula de movilidad que el Poder Ejecutivo había instaurado mediante el DNU 274/24.
En respuesta a los cuestionamientos del Gobierno sobre el origen de los recursos, el proyecto incluye un capítulo de financiamiento que prevé medidas como la eliminación de la exención del IVA para directores de empresas, la eliminación de la exención de Ganancias a las sociedades de garantía recíproca, el ahorro generado por la quita de sobrecargos a los intereses del FMI y un redireccionamiento de partidas destinadas a la SIDE, entre otras.
Reinstauración de la moratoria previsional
Contra todo pronóstico, y con el apoyo de Unión por la Patria y el Frente de Izquierda, se logró la prórroga por dos años de la vigencia del capítulo II de la ley 27.705 y del Plan de Pago de Deuda Previsional. Este plazo podrá ser prorrogado por igual lapso por el Poder Ejecutivo Nacional. La votación de este punto específico resultó con 111 votos afirmativos, 100 en contra y 15 abstenciones.
El debate en el recinto: Costo fiscal vs. recomposición de haberes
El debate, que se extendió por más de cinco horas, estuvo marcado por fuertes intercambios de argumentos.
Desde Unión por la Patria, la diputada Victoria Tolosa Paz, miembro informante, enfatizó que “la calle nos lo exige y no hay patria pegándole a los jubilados”, remarcando que el aumento busca reparar el ajuste derivado de la devaluación del peso. Cuestionó el congelamiento del bono y la pérdida de poder adquisitivo de los jubilados, asegurando que el costo del bono de $115.000 (0,3% del PBI anual) es “financiable y justo”.
El oficialismo, en tanto, rechazó la propuesta desde el primer momento, haciendo énfasis en el elevado costo fiscal que, según el diputado Martín Menem, ascendería a 12 mil millones de dólares (1,8% del PBI). El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ratificó la postura del Gobierno de vetar cualquier ley que “rompa el equilibrio fiscal”.
Diputados del PRO como Sergio Capozzi y Daiana Fernández Molero criticaron las moratorias previsionales, atribuyéndoles el “perforamiento” del sistema y proponiendo una reforma integral que incluya una pensión proporcional basada en años de aportes y una prestación básica universal.
Desde La Libertad Avanza, el diputado Carlos Zapata apuntó contra el kirchnerismo por sus “parches” al sistema y por su presunta intención de “destruir el equilibrio presupuestario”. Afirmó que la oposición se opone a las medidas del Gobierno para generar trabajo y que “si no hay más productividad, no vamos a poder beneficiar a los jubilados”. Santiago Santurio tildó a la oposición de “desvergonzada” y criticó las políticas pasadas que, a su juicio, aumentaron el déficit y la pobreza.
El diputado del Frente de Izquierda, Nicolás del Caño, lamentó que los jubilados sean “las principales víctimas de la motosierra de Milei”, y señaló que la jubilación mínima debería cubrir la canasta básica.
El debate también contó con la participación de la radical Gabriela Brouwer de Koning, quien defendió la propuesta de su bloque de reconocer a quienes aportaron, aunque no cumplan los 30 años, buscando una “prestación proporcional”. La diputada Mónica Macha (UP) puso el foco en el “sesgo de género y de clase” de la moratoria, destacando que sin ella, la mayoría de las mujeres y un gran porcentaje de hombres no podrían jubilarse.
Finalmente, el diputado libertario Álvaro Martínez cerró el debate oficialista calificando la sesión como un “acto de irresponsabilidad legislativa” por aumentar el gasto sin un financiamiento claro y acusó a la oposición de “demagogia” y de haber dinamitado el sistema previsional.