Detuvieron a Laudelina, la tía de Loan: confesó que plantó el botín para desviar la investigación

En un giro sorprendente en el caso de la desaparición de Loan, la Justicia Federal de Goya imputó a Laudelina Peña, tía del niño, por su participación en la sustracción y ocultamiento del chico. Tras una extensa indagatoria, la jueza Cristina Pozzer Penzo ordenó su detención, atendiendo al pedido de los fiscales del caso.

Peña, acompañada de su abogado José Codazzi, respondió voluntariamente a más de 60 preguntas durante su declaración. Según fuentes de la causa, confesó haber plantado el botín de su sobrino en el naranjal del paraje Algarrobal, con el objetivo de desviar la investigación. La noticia provocó una intensa protesta entre los vecinos de Goya.

Sin embargo, el relato de Laudelina presenta un giro aún más inesperado. Aunque previamente había declarado que Carlos Pérez, el principal sospechoso, había atropellado y matado a Loan con su Ford Ranger, ahora asegura no saber la ubicación del cuerpo. Sorprendentemente, afirma que piensa que su sobrino está vivo. Además, mencionó que María Victoria Caillava la había amenazado para que guardara silencio.

Los fiscales Mariano de Guzmán, Alejandra Mangano y Marcelo Colombo habían solicitado la detención de Laudelina días atrás, basándose en la sospecha de que ella había plantado el botín para confundir a los investigadores. Aunque la jueza Pozzer Penzo inicialmente denegó el pedido por falta de pruebas, los fiscales continuaron su trabajo para reunir más evidencia.

Una de las medidas tomadas fue la pericia al celular de Laudelina, realizada en la División Pericias Telefónicas de la Policía Federal. El teléfono fue obtenido durante un allanamiento en su casa en 9 de Julio, donde también se confiscó el teléfono de su hija. Las pruebas que incriminaron a Laudelina provinieron de análisis de comunicaciones y relatos de testigos, así como de pericias a los teléfonos incautados mediante el sistema UFED.

En paralelo, el Instituto Médico Forense tomó nuevas muestras de ADN de la familia de Loan, complementando las entregadas previamente cuando la Justicia federal asumió el caso. Además, se allanó la Comisaría de 9 de Julio, bajo la dirección de Walter Maciel, quien está imputado por encubrimiento en la desaparición del niño. Se recabaron cinco nuevas declaraciones testimoniales, incluyendo la del párroco local.

En un último esfuerzo por encontrar respuestas, varios peritos esperan la autorización de Pozzer Penzo para romper una losa descubierta en el cementerio de 9 de Julio. La tumba, construida aproximadamente hace 20 días, coincide con el momento de la desaparición de Loan. A pesar de analizarla con georradar, no se obtuvieron resultados, lo que llevó a considerar la ruptura de la estructura como una opción final.