
La Municipalidad de Santa Fe llevó adelante una serie de operativos de control vehicular durante el último fin de semana en distintos puntos estratégicos de la ciudad.
Como resultado, se detectaron un total de 119 vehículos cuyos conductores infringieron diversas normativas de tránsito, motivo por el cual fueron retenidos.
Entre las principales causas de las retenciones se encuentran la presencia de alcohol en sangre en conductores, la falta o irregularidad en la documentación exigida, y la ausencia de medidas de seguridad, como el uso del casco en motociclistas.
Los operativos se desplegaron en arterias y sectores de alta circulación, tales como las avenidas Galicia, General Paz, Almirante Brown, López y Planes, Aristóbulo del Valle y bulevar Gálvez, así como en los barrios Barranquitas, María Selva, Sargento Cabral, 7 Jefes, Candioti y Escalante.
Del total de vehículos retenidos, 32 correspondieron a automóviles: 25 de ellos por alcoholemia positiva y 7 por irregularidades documentales.
En cuanto a las motocicletas, se registraron 87 retenciones, de las cuales 76 fueron por falta o anomalías en la documentación y medidas de seguridad, y 11 por presencia de alcohol en sangre del conductor.
Desde el municipio destacaron la continuidad de estos controles con el objetivo de promover una mayor seguridad vial y reducir los índices de siniestralidad en la capital provincial.