El Gobierno presenta modificaciones en la ley ómnibus que incluyen cambios sustanciales en el sistema de jubilaciones, con énfasis en la eliminación de las jubilaciones de privilegio. La propuesta, ingresada al Congreso, busca redefinir los beneficios jubilatorios, especialmente aquellos destinados a la “casta” política.
En una movida significativa, el Gobierno presentó cambios sustanciales en la ley ómnibus, que ingresó al Congreso este lunes. Estas modificaciones impactan directamente en el sistema de jubilaciones, pensiones y, en particular, en las jubilaciones de privilegio que reciben los miembros de la “casta” política.
Uno de los cambios más destacados es la eliminación de las jubilaciones de privilegio para el presidente y el vicepresidente. Este ajuste pretende poner fin a un sistema que otorgaba pensiones vitalicias basadas en la remuneración de los jueces de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
La propuesta busca reformular por completo el esquema de beneficios jubilatorios, planteando un escenario en el cual los líderes políticos ya no recibirán jubilaciones especiales una vez que finalicen sus mandatos. Es importante señalar que estos cambios deberán ser tratados y aprobados por los legisladores para convertirse en ley y entrar en vigor.
Mientras tanto, el oficialismo se encuentra acelerando las negociaciones en la Cámara de Diputados para lograr la aprobación de la ley ómnibus. La prórroga de las sesiones extraordinarias hasta el 15 de febrero proporciona un marco temporal para debatir y discutir la iniciativa en los próximos días. La eliminación de las jubilaciones de privilegio marca un paso significativo hacia la equidad y la transparencia en el sistema jubilatorio del país.
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