
Esta decisión representa un avance significativo para el sector ganadero y una nueva fuente de divisas para el país.
El Gobierno nacional derogó un decreto de 1973 que impedía la exportación de ganado vacuno en pie, eliminando la necesidad de autorización previa para esta actividad.
La medida, formalizada este miércoles a través del Decreto 133/24 firmado por el presidente Javier Milei y el ministro de Economía Luis Caputo, pone fin a una prohibición que respondía a una situación específica de abastecimiento en 1973.
Federico Sturzenegger, funcionario del Gobierno, destacó en la red social X: “La prohibición se impuso por un problema de abastecimiento en 1973 y, como en Argentina no hay nada más permanente que lo transitorio, quedó vigente por 50 años”.
Una oportunidad para nuevos mercados
La exportación de ganado en pie es un mercado dinámico y relevante a nivel global. Sturzenegger subrayó que “92 países exportan ganado en pie, siendo Australia el líder mundial con barcos que transportan hasta 30.000 cabezas para abastecer el mercado asiático”.
Además, mencionó que países como Francia, Canadá, Uruguay y Brasil tienen una participación activa en este sector, con exportaciones que superan los 1.000 millones de dólares anuales en algunos casos.
Un producto de alto valor
El ganado en pie es especialmente valorado en mercados con métodos particulares de faena. Sturzenegger ejemplificó: “Turquía, por ejemplo, no faena animales castrados. Excluirnos gratuitamente de esos mercados es un sinsentido”. Esta apertura permitirá a Argentina acceder a nichos de mercado que antes estaban fuera de su alcance.
Eliminación de barreras comerciales
El decreto también aborda la necesidad de eliminar restricciones autoimpuestas que limitan el potencial exportador del país. Sturzenegger criticó la falta de debate sobre estas barreras: “En las últimas semanas se discutió el tipo de cambio, pero se omitió la extraordinaria cantidad de restricciones que le habíamos autoimpuesto a nuestro comercio”.
Además del ganado en pie, mencionó casos como los cueros, el carbón y la chatarra, que enfrentan prohibiciones o limitaciones que dificultan su exportación.
Impacto económico y laboral
El Gobierno argumenta que esta medida promoverá una mayor inserción de Argentina en el comercio mundial, basándose en un sistema económico que respeta la libre concurrencia, la propiedad privada y los principios constitucionales de libre circulación de bienes, servicios y trabajo.
El decreto establece: “Se dispondrá la más amplia desregulación del comercio, los servicios y la industria en todo el territorio nacional, eliminando restricciones que distorsionan los precios de mercado o impiden la libre iniciativa privada”.