En la antesala de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) de 2023 en Argentina, el enfoque se centra en el Comando General Electoral (CGE), la entidad encargada de asegurar la integridad y seguridad de uno de los pilares fundamentales de la democracia: el proceso electoral. Aunque es el Gobierno Nacional quien tiene la responsabilidad de orquestar las elecciones en el país, el CGE se erige como el protector principal de los votos de los ciudadanos.
Encabezando esta operación sin precedentes se encuentra el general de brigada Jorge Fabián Berredo, actual Comandante Operacional y tercera figura en importancia dentro del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, sólo por debajo del jefe y el subjefe.
Su labor consiste en coordinar y ejecutar las medidas de seguridad contempladas en el Código Electoral Nacional, así como facilitar el cumplimiento de otras disposiciones legales relacionadas con el proceso electoral, tal como informa la Dirección Nacional Electoral (DINE) en su sitio web oficial.
El despliegue del CGE es colosal, con aproximadamente 85,300 efectivos provenientes de diversas ramas de las Fuerzas Armadas y organismos de seguridad, como el Ejército, la Armada, la Fuerza Aérea, la Gendarmería Nacional (GNA), la Prefectura Naval (PNA), la Policía Federal (PFA), la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y las Policías Provinciales.
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Desde el Ministerio del Interior, se informa que el Comando General Electoral dispondrá de un amplio arsenal de recursos para llevar a cabo su misión, incluyendo 3,100 vehículos terrestres, un avión “Hércules” C-130, 12 helicópteros, tres embarcaciones y alrededor de 100 mulas destinadas a transportar urnas en las zonas montañosas del país.
El General Berredo ha destacado la naturaleza descentralizada de la operación, que busca llegar hasta los rincones más remotos del territorio argentino. En una reunión preliminar con autoridades clave, explicó la importancia de un enfoque interdisciplinario y colaborativo con entidades como la Cámara Nacional Electoral, la Dirección Nacional Electoral y el Correo Argentino.
Con un monitoreo constante en los 24 distritos y cobertura en los 17,432 locales de votación, el operativo se asegura de que más de 108,000 mesas estén listas para las votaciones nacionales y extranjeras. Además, se presta atención especial al pronóstico meteorológico en todo el país para garantizar que las urnas lleguen a los lugares más remotos, incluidas las bases antárticas donde residen 221 votantes habilitados.
Mientras que la función principal del Comando General Electoral es la coordinación y ejecución de medidas de seguridad, también se destaca su papel en la vigilancia de los locales de votación y sedes de la Justicia Nacional Electoral de cada distrito, subrayando así su compromiso con la protección de un proceso electoral seguro y transparente.