La Caja Municipal de Jubilaciones y Pensiones de Santa Fe ha retomado un exhaustivo plan de inspección y supervisión sobre los municipios adheridos de la provincia de Santa Fe, después de varios años sin realizar este tipo de controles.
Desde 2020, antes de la pandemia, no se inspeccionaban las contribuciones y aportes que cada municipio debe realizar, lo que ha generado una situación preocupante, especialmente en términos de déficit en algunos casos.
Este proceso busca garantizar que los 51 municipios adheridos, más la ciudad capital, cumplan con las normativas establecidas y aseguren el pago oportuno de las jubilaciones y pensiones.
La situación actual: déficit en los aportes
La irregularidad más detectada durante las inspecciones ha sido el déficit en los aportes y contribuciones que tanto los empleados municipales como los municipios deben realizar a la Caja Municipal.
Estos aportes son fundamentales para la sostenibilidad del sistema previsional, ya que constituyen los ingresos que permiten a los jubilados municipales recibir sus haberes en tiempo y forma.
Hasta el momento, se han inspeccionado presencialmente los municipios de San Cristóbal, Ceres, Vera y Calchaquí, y se espera llegar a diez municipios supervisados antes de que finalice el año.
Además, ya se han llevado a cabo reuniones con autoridades de Laguna Paiva y Gálvez para tratar de regularizar las cuentas y mejorar la transparencia en los aportes.
Un contexto deficitario alarmante
La situación financiera de la Caja Municipal de Jubilaciones y Pensiones no es uniforme en toda la provincia. Si bien algunos municipios no presentan déficit, otros están en una situación deficitaria, y en algunos casos se ha detectado superávit, aunque esto no implica necesariamente que no existan irregularidades en la declaración de aportes.
En 2023, la Caja acumuló un déficit de $39.416.480,35, y aunque las cifras para 2024 varían mes a mes, los números continúan mostrando un desequilibrio preocupante.
Uno de los municipios más importantes en este sistema es la ciudad de Santa Fe, que cuenta con 9.096 agentes municipales activos. De ese total, 3.900 son empleados municipales de la capital, lo que convierte a esta jurisdicción en una de las más relevantes en términos de aportes y contribuciones al sistema previsional.
El proceso de inspección: normas y procedimientos
La normativa que regula los procedimientos de inspección y control de la Caja está establecida en la Ordenanza N° 6.166, vigente desde la década de los 80.
Esta normativa faculta a la Junta Administradora a realizar inspecciones en los municipios adheridos para verificar que los aportes y contribuciones se realicen de manera adecuada.
Después de varios años sin supervisiones, en mayo de 2023 se aprobó un plan anual de inspecciones mediante la Resolución N° 6666, que establece los criterios de selección de los organismos a inspeccionar, basados en irregularidades detectadas y aspectos geográficos.
El proceso de inspección incluye la revisión de declaraciones juradas, donde los municipios informan la nómina de empleados, los montos abonados y los aportes correspondientes. También se verifica que estos aportes coincidan con los recibos de sueldo y otros documentos como ART, pólizas de seguros y extractos bancarios.
La Caja notifica a los municipios con 48 horas de antelación antes de cada visita, para garantizar que los documentos necesarios estén disponibles.
En algunos casos, se han emitido intimaciones para que los municipios remitan la información faltante y se pueda establecer con mayor precisión el déficit detectado en cada inspección.
Planes de pago y soluciones para los municipios en mora
Uno de los problemas recurrentes en varios municipios es la acumulación de deudas con la Caja, lo que pone en riesgo la sostenibilidad del sistema previsional.
En respuesta a esta situación, la Junta Administradora ha establecido planes de pago y convenios de pago en cuotas de hasta 36 meses para los municipios en mora, con el objetivo de que puedan regularizar sus cuentas.
Este mecanismo busca dar una solución a los municipios que enfrentan dificultades financieras, asegurando al mismo tiempo que los jubilados municipales no se vean afectados por la falta de aportes.
