La noticia no solo sacudió a la comunidad cordobesa, sino que puso de relieve la crueldad y la premeditación con la que se llevó a cabo este crimen.
Esta mañana, la Justicia de Córdoba dictó sentencia en uno de los casos más conmocionantes de los últimos años: Irina Flehr y su novio, Leandro Moscarello, fueron condenados a prisión perpetua por el asesinato de Reynaldo Flehr, arquitecto de 61 años, ocurrido en diciembre de 2021.
El tribunal de Córdoba no dejó lugar a dudas: Irina y Leandro fueron considerados los principales instigadores del asesinato, mientras que Samuel Moscarello y David Silvestre, los ejecutores del macabro plan, también recibieron la misma condena.
Por su parte, David Suárez, un tercer implicado en el caso, fue sentenciado a 13 años de prisión, al ser considerado partícipe secundario del homicidio.
Durante el juicio, el fiscal de Cámara, Fernando López Villagra, se mostró firme en su alegato, solicitando la pena máxima para todos los involucrados.
En cuanto a Suárez, el fiscal argumentó que su participación, aunque significativa, no alcanzó el mismo nivel de responsabilidad que la de los otros acusados, lo que justificó una pena menor.
La defensa de Irina Flehr
Antes de que se dictara la sentencia, Irina Flehr se dirigió al tribunal en un intento por defender su inocencia. “Se dijeron un montón de cosas de mí que no existieron, que no fueron así. Solamente quiero limpiar mi nombre, quiero volver a casa con mi hija, es lo único que quiero hacer”, declaró la joven. Sin embargo, sus palabras no fueron suficientes para cambiar el curso de la Justicia.
El fiscal López Villagra fue contundente al describir a Irina y Leandro como los cerebros detrás del homicidio, catalogando el crimen como un “homicidio calificado por el vínculo, por alevosía, por codicia y por el concurso premeditado de dos o más personas, agravado por el uso de arma de fuego”.
El asesinato de Reynaldo Flehr
El 28 de diciembre de 2021, Córdoba se despertó con una noticia escalofriante: Reynaldo Flehr fue encontrado asesinado en su hogar, ubicado en el barrio Los Boulevares.
La escena del crimen dejó perplejos a los investigadores: Flehr estaba maniatado, amordazado y había recibido dos disparos en la cabeza. No había señales de lucha previa, lo que hizo suponer una ejecución planificada.
Los investigadores rápidamente centraron sus sospechas en la hija del arquitecto y su novio, quienes, según la acusación, habrían urdido el plan para asesinar a Reynaldo, mientras que Moscarello, Suárez y Silvestre se encargaron de ejecutar el brutal crimen.
Las últimas palabras de Irina
Desde su encarcelamiento, Irina Flehr ha mantenido su inocencia. En una entrevista desde la cárcel de Bouwer, afirmó: “Quiero vivir una vida normal, creo que se habló en toda la Argentina sobre este caso y se manchó mi nombre para el resto de mi vida”.
Sin embargo, las evidencias presentadas en el juicio fueron suficientes para que el tribunal la condenara a prisión perpetua.
En sus declaraciones, Irina también habló sobre su relación con su padre y negó haber tenido conflictos significativos con él. “Mi papá era la única persona que tenía de mi lado, era la única de mi sangre, aparte de mi hija”, expresó.