La llegada de los nuevos billetes de $20.000: ¿Alivio o complicación?

En medio de quejas por la falta de efectivo para realizar operaciones, se conoció que recién a fines de octubre llegarían desde China los primeros billetes de $20 mil. A fines de noviembre, entrarían en circulación.

En un contexto de alta inflación y escasez de efectivo, la noticia de la llegada de nuevos billetes de $20.000 genera tanto expectativa como preocupación entre los argentinos. El Banco Central de la República Argentina (BCRA) ha confirmado que los primeros billetes de esta nueva denominación, impresos en China, arribarán al país a finales de octubre. Sin embargo, su circulación efectiva no será inmediata, ya que se estima que comenzarán a distribuirse a través de los cajeros automáticos a fines de noviembre.

La situación económica del país ha generado una creciente demanda de billetes de mayor denominación. Los billetes de $10.000, que ya están en circulación, han resultado insuficientes para satisfacer las necesidades de transacción de la población. Ante esta realidad, el BCRA ha optado por importar 230 millones de billetes de $20.000 desde China, buscando aliviar la presión sobre el efectivo disponible.

Las demoras en la llegada y distribución de estos nuevos billetes han sido motivo de críticas y cuestionamientos. Según fuentes del BCRA, la decisión de imprimir en el extranjero se debe a las limitaciones operativas de la Casa de la Moneda local. “Cuando llegamos al BCRA, queríamos facilitar las transacciones de la gente. Pero la Casa de la Moneda estaba explotada. La dejaron destruida”, explicaron desde la entidad a cargo de Santiago Bausili.

En este contexto, la oferta actual de billetes resulta insuficiente para las necesidades cotidianas. Actualmente, hay en circulación 10.887 millones de billetes, de los cuales el 56% corresponde a billetes de $1.000, con las imágenes del hornero y de José de San Martín. Los billetes de $2.000, por su parte, representan menos del 7% del total circulante, con 734 millones de unidades.

La llegada de los nuevos billetes de $20.000 representa una medida necesaria para enfrentar la demanda de efectivo en medio de una inflación persistente. Sin embargo, la eficacia de esta medida dependerá de la rapidez y eficiencia con la que se logre distribuir estos billetes en todo el país. En un escenario económico tan volátil, cualquier retraso o problema logístico puede generar más complicaciones que soluciones.

Mientras tanto, la población espera con ansias la llegada de estos billetes, con la esperanza de que contribuyan a aliviar las dificultades actuales en las transacciones diarias. Sin embargo, la incertidumbre sobre la estabilidad económica del país y la capacidad del BCRA para manejar la situación persiste.