El reciente recorte en los rendimientos de los depósitos a plazo fijo, impulsado por el Banco Central al modificar su tasa de referencia y desregular el piso mínimo de rendimiento, ha generado repercusiones en otros sectores financieros.
Entre estos cambios se encuentra la necesidad de ajustar los intereses del programa Cuota Simple, una medida adoptada por el Gobierno para fomentar el consumo.
Anteriormente, los bancos estaban obligados a pagar un mínimo del 110% nominal anual en los depósitos a plazo fijo. Sin embargo, con la eliminación de este piso por parte del Banco Central, el Gobierno ha decidido reducir las tasas del programa Cuota Simple con el objetivo de estimular el consumo.
En este nuevo escenario, la tasa de interés para las compras con tarjeta de crédito en 3 cuotas será del 9,34%, mientras que para las compras en 6 cuotas será del 17,32%. Estos valores representan una disminución significativa con respecto a las tasas previas del programa.
Es importante destacar que anteriormente, la tasa de la Cuota Simple equivalía al 93,5% de la tasa mínima de los plazos fijos. Con la eliminación de este parámetro, la tasa pasará a ser del 80% nominal anual.
Los principales bancos del país ya han ajustado sus rendimientos a un rango entre el 70% y el 75%, reflejando la nueva realidad del mercado financiero.
El programa Cuota Simple, que entró en vigencia a principios de febrero y se extenderá inicialmente hasta el 31 de mayo, ofrece la posibilidad de financiar compras en 3 y 6 cuotas fijas con tarjetas de crédito bancarias y con tasas competitivas. Esta iniciativa busca incentivar el consumo de productos nacionales y está disponible en todo el país, tanto en tiendas físicas como virtuales adheridas.
Al mantener la idea de financiar a un menor costo productos de fabricación nacional y al ofrecer plazos de financiamiento populares entre los consumidores, como las 3 y 6 cuotas, el programa Cuota Simple busca dinamizar la economía y promover el consumo en el mercado local.