El Ministerio de Salud de Argentina ha emitido un preocupante informe sobre el brote de dengue que está afectando al país. Según el Boletín Epidemiológico Nacional, hasta la semana 13 de la temporada 2023/2024 se han registrado alarmantes cifras: más de 230 mil casos de dengue y 161 personas fallecidas a causa de esta enfermedad transmitida por el mosquito Aedes aegypti.
La situación epidemiológica del dengue en Argentina ha sido influida por varios factores:
Persistencia de casos durante todo el período analizado: A diferencia de años anteriores, en esta temporada se ha observado una persistencia de casos a lo largo de todo el período estacional, con un aumento significativo desde principios de octubre. Este fenómeno ha desafiado las proyecciones habituales sobre la actividad del virus.
Adelantamiento del aumento estacional: Se ha detectado un adelantamiento en el aumento estacional del dengue, comenzando desde la semana 40 y acelerándose aún más desde la semana 6. Este patrón inusual ha contribuido al incremento exponencial de casos.
Circulación de múltiples serotipos del virus: Durante esta temporada se han identificado hasta tres serotipos circulando en el país, con predominio del DEN-2, seguido de DEN-1 y algunos casos de DEN-3. Esta diversidad viral puede complicar la respuesta sanitaria y la efectividad de las medidas preventivas.
El impacto del brote de dengue se ha sentido en todo el territorio argentino, pero algunas regiones han sido particularmente afectadas:
– Región Centro: Esta región ha aportado el mayor número de casos, representando el 56% del total. La incidencia acumulada también es elevada en esta área.
– Región NEA y NOA: Con el 24% y 19% de los casos respectivamente, estas regiones también han experimentado una alta carga de enfermedad.
– Regiones Cuyo y Sur: Aunque presentan un menor número de casos, es importante destacar que también han registrado incidencias acumuladas bajas.
La médica infectóloga Silvia González Ayala advierte que el descenso de casos de dengue será gradual y dependerá de las condiciones climáticas. Para impactar en la población de mosquitos, se necesitan temperaturas sostenidas por debajo de los 10 grados.
Sin embargo, la eliminación de criaderos y la educación para la salud son clave para prevenir la propagación continua del virus.
Entre las medidas preventivas recomendadas se encuentran:
– Eliminación de criaderos: Es fundamental eliminar o higienizar con frecuencia los recipientes que acumulan agua, tanto dentro como fuera de las viviendas.
– Uso de repelentes: Utilizar repelentes según las indicaciones de los fabricantes para protegerse de las picaduras de mosquitos.
– Participación comunitaria: La colaboración de toda la comunidad en la eliminación de criaderos y en la implementación de medidas preventivas es esencial para controlar la propagación del dengue.
En resumen, el brote histórico de dengue en Argentina representa un desafío significativo para las autoridades sanitarias y la población en general. La adopción de medidas preventivas y la concienciación sobre la importancia de eliminar criaderos y protegerse de las picaduras de mosquitos son fundamentales para mitigar el impacto de esta enfermedad en la salud pública.