En un giro sorprendente de los acontecimientos, las cámaras de seguridad municipales han desmentido una denuncia de asalto en una agencia de quiniela en la calle Jaime Ferré, frente a la plaza de barrio Italia.
La denuncia fue realizada por una empleada de la agencia, quien afirmó haber sido víctima de un violento asalto por parte de dos individuos en la mañana del martes. Según su relato, los hombres la interceptaron cuando intentaba abrir la puerta de la agencia, la amenazaron con gritos y la forzaron a ingresar al local. Una vez dentro, supuestamente la obligaron a abrir la caja registradora y se llevaron el dinero en efectivo disponible.
La Policía de Investigaciones (PDI) inició una investigación y revisó las grabaciones de las cámaras de seguridad municipales ubicadas en la intersección de las calles Destéfanis y Jaime Ferré. Sin embargo, los videos no mostraron ningún indicio de asalto en el lugar y a la hora mencionados por la empleada.
Ante esta revelación, la PDI está ahora investigando los motivos detrás de la falsa denuncia. La actitud de la joven, quien aseguró haber sido asaltada, está bajo escrutinio. Se busca entender qué pudo haberla llevado a realizar tal afirmación sin fundamento.
Este suceso pone en evidencia la importancia de contar con cámaras de seguridad para verificar hechos denunciados y subraya la necesidad de investigar a fondo las denuncias para evitar malentendidos y asegurar que los recursos policiales se utilicen adecuadamente.
Este caso sirve como un recordatorio de que las cámaras de seguridad son una herramienta vital para la verificación de hechos y la prevención de malentendidos. También destaca la importancia de la honestidad y la integridad en todas nuestras interacciones, y el papel crucial que juegan estas cualidades en la construcción de una sociedad segura y justa.
En la mañana de este martes dos hombres sorprendieron a la responsable de una agencia de quiniela ubicada en calle Jaime Ferré al 1100, frente a la Plaza del barrio Italia, cuando la mujer volvía de llevar a su hija a la escuela.
Los individuos amenazaron a la mujer (las primeras informaciones indican que tenían un arma de fuego) y mientras uno la retenía el restante habría tomado el dinero recaudado en la registradora, para luego darse rápidamente a la fuga.
La damnificada radicó la denuncia ante personal policial quienes comenzaron con las diligencias investigativas de rigor, colectando imágenes de las cámaras de seguridad.