La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), organismo que reemplazó a la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), ha anunciado importantes cambios en la regulación de las transferencias electrónicas y los movimientos financieros a través de billeteras virtuales.
Estos ajustes buscan reforzar la supervisión y garantizar la transparencia en las operaciones realizadas por medios digitales.
Uno de los aspectos clave de la nueva normativa es la exigencia de informar los saldos mensuales iguales o superiores a $700.000 en billeteras virtuales.
Este umbral fue establecido con el fin de detectar posibles irregularidades fiscales y verificar la legitimidad de los fondos involucrados.
Además, la ARCA determinó que las transferencias individuales que superen los $400.000 deberán estar debidamente justificadas.
En caso de que no se pueda acreditar el origen de los fondos, las entidades financieras y las aplicaciones de pago estarán obligadas a reportar dichas operaciones al organismo, lo que podría derivar en la apertura de una investigación.
A partir de enero de 2025, los montos establecidos por ARCA se ajustarán automáticamente de acuerdo al Índice de Precios al Consumidor (IPC) publicado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
Este mecanismo permitirá que los límites se mantengan actualizados frente a la inflación, garantizando una supervisión financiera acorde al contexto económico.
Cada entidad bancaria y billetera virtual tiene su propia reglamentación respecto a la cantidad y el monto de las transferencias diarias.
Por ejemplo, algunos bancos permiten transferencias de hasta $8.000.000 por día, mientras que plataformas como MODO y Mercado Pago tienen límites de $2.000.000 y $500.000, respectivamente.